Escrito por: Carolina Leiva Binimelis
Florecer es una película de un poco más de 13 minutos que enseña la
manera en la que vive el confinamiento una madre- abuela, de esas que inauguran un clan.
La película se inicia con la celebración de su cumpleaños, instancia que
probablemente era considerada como un evento esperado y necesario antes de la pandemia, y que las limitaciones del estado excepcional, no lo impedirían esta vez. Es así como se reúnen a través de una plataforma para festejarla. Los rostros enmarcados dentro de una pantalla son la descendencia que ella formó y que vuelven a homenajearla.
En la película aparecen las plantas de su jardín vertical que también están
enmarcadas y que ella cuida con afán. Ella se regocija en la belleza de esos
cultivos, que nos recuerdan que existe la vida, a pesar del encierro, del virus y de la muerte.
El cortometraje nos da la sensación de que es el retrato del cotidiano, de
esas tardes de silencio en las que se espera que hierva la tetera para tomarse un tecito, conversar un rato, y volver la mirada sobre lo andado, gracias a otros relatos enmarcados: las fotografías, que ella recorre con sus dedos como un ejercicio de memoria. En su casa hay espacios que están situados para la conmemoración, los demás lo saben, la acompañan y le preguntan.
La película es una evocación no solo a ella y a su vida, sino al tiempo, es
decir, una manera de estar en el tiempo, sin apuros, con sosiego, el necesario para esperar que florezca su jardín, que su familia se reúna, o que el virus pase pronto.